¿Haces fila para entrar al vagón? Este programa que fue implementado por la UNAM desde hace un año ya está rindiendo sus primeros frutos, pues ha logrado disminuir los robos y acosos en el Metro.

La iniciativa que se puso en marcha por primera vez en diciembre de 2016, en Balderas, fue replicada en 13 estaciones, ahora, no solo los chilangos hacen fila por sí solos para acceder al vagón, sino que hasta se portan mejor.

«Con la primera (la de Balderas) logramos una disminución en tiempos de espera de un 15 %y creemos que, como ya hay más operando bajo este sistema, el índice se ha incrementado, pero aún falta corroborarlo», señaló el investigador Carlos Gershenson en una publicación de UNAM Global.

Aunque el objetivo del programa era agilizar el acceso, encontraron otros resultados que no se esperaban, como una disminución del número de robos y acosos en las estaciones en donde se aplica.

Según la explicación de Gershenson, quien es uno de los creadores del proyecto, esto se debe a que «al formarse en un sitio específico y esperar su turno, la gente no se apelotona ni choca entre sí y esto, además de hacer más fluido el tránsito, obstaculiza la labor de los carteristas, quienes procuran las aglomeraciones y se valen de la proximidad de los cuerpos para ocultar sus maniobras, al igual que los acosadores».

El investigador atañe el éxito del proyecto a que las señalizaciones son tan intuitivas que de inmediato la gente sabe qué hacer y dónde esperar.

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