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El secreto mejor guardado de Iztalapapa

La Iglesia de los Cien Santos

13 de mayo de 2015
Por    El Memo (@guillermo_ga)

La colonia La Era, en Iztapalapa, no tiene mucho de especial: aparte de tener el cuartel general de los famosísimos Ángeles Azules, la colonia se compone de pequeñas calles, un mercado, algunas tiendas de abarrotes y un tianguis que se pone los martes. Sus calles tienen nombres de poetas famosos y donde se cruzan Lucio Blanco y Juan de Dios Peza se encuentra la iglesia de Santa María de San Juan: el secreto mejor guardado de Iztapalapa. 

  • Foto: El Memo
  • Hace poco más de 20 años en este terreno comenzó a construirse la pequeña iglesia, con unas sillas improvisadas y un altar. El párroco de ese momento trató de tener un templo y comenzó la construcción. Pero todo cambió con la llegada del cura actual, el Padre Humberto, que decidió que en vez de tener esculturas, esa iglesia se iba a caracterizar por tener cuadros pintados al óleo. Hizo una cooperacha de limosnas entre los vecinos para comprar una pequeña pintura. Luego otra y otra más. A los parroquianos les entusiasmó la idea de tener cuadros con sus santos más venerados y después de cada misa cooperaban gustosos para adquirir uno nuevo cada semana (la mayoría de un pintor que firma como Domínguez). Hoy tiene decenas. 

  • Foto: El Memo
  • La iglesia hoy dista mucho de aquel terreno cubierto con láminas. El Padre Humberto se enorgullece de dirigir el templo con más cuadros de toda la ciudad (de hecho, es tal la cantidad que dudamos que haya un templo similar en toda Latinoamérica). Es la Iglesia de los Cien Santos. ¿Conocen la cara de San Antolín de Palencia? ¿Sabían que hay un San Aprio? ¿Quién es San Pafnuncio? Todos están aquí: personajes bíblicos, beatos, Papas, vírgenes, y todos los santos que se les ocurra. Hasta Noé, Matusalem, Oseas, Nahum y Habacuc: si aparece en la Biblia, seguro lo encuentran. 

  • Foto: El Memo
  • Hasta las flores están pintadas al óleo: al día de hoy hay pocos huecos vacíos (alcanzamos a ver sólo una trabe del techo esperando ser llenada con este barroquismo ecléctico). La pequeña capilla lateral no se queda atrás: cuadros redondos, tablones, pequeños retratos y muchos (pero muchos) medallones de madera completan este lugar. Jamás habíamos visto cosa igual. 

  • Foto: El Memo
  • Los feligreses están contentos con su iglesia. Una señora que entrevistamos la considera la más bonita de todo México y le da gusto que el Padre Humberto haya puesto tanto esfuerzo en dejarla así: "en la misa el cura nos dice qué cuadro va a adquirir y cuánto va a costar. Entre todos ponemos un poco y mire, ya llenamos todas las paredes. Creo que esa es una buena muestra de que cuando nos proponemos algo, lo hacemos. Hoy el Padre ya está grande, pero en hace unos años hasta componía poemas y canciones para la misa. A mí me gusta mucho venir aquí, ni la del centro (de Iztapalapa) es tan bonita". 

  • Foto: El Memo
  • Si quieren visitar este lugar, la manera más sencilla es ir por la avenida Ermita Iztapalapa y pasando el Periférico dar vuelta en Juan de Dios Peza. Los domingos hay varios puestos de comida alrededor por si les da hambre en lo que buscan dónde está su santo patrono. Les aseguramos que entre tanto cuadro, seguro encuentran uno que les acomode.

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