Pineda Covalín

En la moda mexicana pocos diseñadores han logrado conseguir una carrera consistente y un estilo definido. Cristina Pineda y Ricardo Covalín son de esos pocos afortunados, a pesar de que esta temporada la colección estuvo a cargo de Daniel Andrade. La marca logró una vez más hacer un poema a la cultura mexicana con sus textiles y sus prendas. La propuesta que vimos estuvo inspirada en Mayahuel, la diosa del maguey pulquero. Como siempre, la seda fue la protagonista, aunque también pudimos ver muchas piezas en gasa. Vimos muchas asimetrías, pantalones a la cintura vestidos en capas con cortes holgados, dando una gran sensación de libertad y comodidad, sin perder el estilo. La mezcla de los distintos textiles en colores que iban desde los tonos más suaves, como el lila, hasta distintos morados, azules, amarillo y salmón, dando un toque tropical.

Lorena Saravia

La favorita del público seguramente fue esta colección. Y no lo decimos porque sea la mejor (aunque fácilmente podría ser), sino porque de todos los diseñadores que presentaron ese día, Lorena fue la que más se acercó al estilo que la gente usa en la calle. En su desfile pudimos ver una colección muy básica, con una estética minimalista. Desfilaron prendas de influencia masculina en una paleta de color neutra, contrastadas con algunas piezas en color coral y prendas adornadas con peplums. En esa clase de detalles se hizo evidente la inspiración de la diseñadora: la bipolaridad.

David Salomon

Ya nos dimos una vuelta por el lado exótico y el lado minimalista de la moda. A David Salomon le tocó mostrarnos la parte femenina. Su propuesta incluyó muchos vestidos en tonos pálidos y detalles metálicos. Algunas prendas, en cambio, fueron completamente metálicas. Sin embargo, lejos de lucir escandalosas, daban un toque glamouroso. Varias de las piezas, sobre todo los vestidos, inspiraban una versión moderna de Audrey Hepburn, femenina y con mucha clase.

Pink Magnolia

Paola Wong, la mente detrás de Pink Magnolia, nos presentó “Baby, light my fire”, una divertida colección, que además tuvo el encanto de traer el mejor styling de la noche. Con una paleta muy variada, que iba desde el rosa vibrante hasta el negro, la diseñadora nos mostró una ola de prendas muy femeninas, en las que no faltaron las transparencias, los brillos, y por supuesto, el peplum, que ha sido la estrella de varias pasarelas a nivel internacional. A pesar de ser muy joven, Paola Wong ha demostrado que, aunque aún le falta madurar como diseñadora, posee un gran talento y gusto por lo que hace.