¿Estarías dispuest@ a deshacerte de tu auto para contribuir a mejorar la movilidad y medio ambiente del DF? Esa es la pregunta que te viene a la mente cuando conoces Carrot y su concepto como alternativa de transporte.

El servicio de autos compartidos cumplió un año, y ya tienen 10,000 usuarios que han disfrutado de las mieles de no hacerse cargo del mantenimiento de un auto, ni se han preocupado por pagar la gasolina o la verificación.

Pero en realidad esta alternativa sólo te funciona si vives cerca de un punto de renta o la combinas con otros medios como la Ecobici y el transporte público, y no la vas a usar más de tres días a la semana.

Aunque pinta como una buena idea para resolver el problema del tráfico y la contaminación, el método de renta y la conexión necesaria para que sea tan funcional como Ecobici aún puede mejorar, pues apenas tienen 40 autos eléctricos en su flotilla.

3,000 de sus usuarios aceptaron que después de conocer el servicio se deshicieron de su coche; 2,700 redujeron sus tiempos de conducción; 4,600 incrementaron el uso del transporte público; 7,700 decidieron postergar la compra de un segundo auto y reconocieron que su calidad de vida mejoró.

En resumen, esos números aún no son lo suficientemente significativos, porque apenas representan de 15 a 20 autos menos en la calle diariamente.

¿Qué es Carrot?

Un sistema de renta de autos eléctricos, por hora o por día.

¿Cómo funciona?

Te inscribes al servicio y te entregan una tarjeta (que ahora también sirve para Ecobici) y te diriges a un Carrot por el auto. Lo usas el tiempo que lo rentaste y lo devuelves al punto donde lo tomaste.

¿Cuánto cuesta?

Si eres usuario ocasional: $300 de inscripción (mensualidad sin costo), más la renta del auto que va de los $90 a los $120 por hora (según el modelo que elijas) o de los $1,200 a los $1,600 por día.

Si eres usuario frecuente: Inscripción sin costo (mensualidad de $100), más la renta del auto de $60 a $120 por hora (según el modelo) o de $900 a $1,200 por día.