Este derivado de Hugh Jackman cumple en entregar acción y músculos pero el alma de la franquicia X-Men de la cual fue engendrada está ausente.
¿DE QUÉ TRATA?
En lugar de regresar a la fuente para hacer el siguiente episodio X-Men esta vez el mutante Wolverine de Hugh Jackman se va por un camino distinto y algo accidentado para explicar los orígenes de Wolverine. Lástima que le hayan robado a Wolverine precisamente los atributos que hicieran que se ganara un lugar en nuestros corazones. X-Men Origins: Wolverine salta 150 años al pasado para revelar la realidad de la relación sostenida entre Logan y Victor, medios hermanos mutantes obligados a huir del hogar cuando Logan mata a su padre biológico. Luego del despliegue de varias escenas donde los hermanos prestan servicio en varias guerras a través de tiempo, la historia aterriza en los años 70 cuando Victor y Logan son reclutados por el torcido William Stryker para servir en el ejército de los mutantes. Luego de participar en la masacre en África oriental Logan sentirá una viva repulsión hacia Stryker y decide empezar una nueva vida en las Montañas Rocosas de Canadá con su novia, Kayla Silverfox. Seis años más tarde Victor – que responde ahora al nombre Sabretooth – consigue a la pareja matando a la novia de Logan. Para vengarse Logan – cuyo nombre actual es Wolverine – renuentemente llega a un acuerdo con Stryker para que él lo haga indestructible. Una vez más el destino le hace una mala jugada a Logan cuando Stryker lo traiciona; Logan descubre que Stryker y Sabretooth han confabulado un plan para secuestrar mutantes para fines poco loables. Al poder escapar la persecución se desata mientras Logran intenta destruir a sus dos peores enemigos – y a cualquier otro que quiera destruirlo – antes de que logren borrarle su memoria.
¿QUIÉN PARTICIPA?
El musculoso Jackman es el eje de esta película alzando a Wolverine a nivel estelar — y es precisamente allí donde radica el problema. Y resulta que habrá que aguantar por largo rato a este Wolverine desprovisto de humor y de poca imaginación ya que Hugh (quien también es productor en esta oportunidad) escogió darle un enfoque sobriamente serio. Jackman solventa bien su tarea en las numerosas escenas de acción, pero fracasa en establecer una comunicación humana duradera entre Wolverine y su público. Liev Schreiber hace un buen trabajo como Sabretooth aunque permanece unidimensional la mayor parte del tiempo. Los tres combates que realiza con Jackman están muy bien coreografiados pero llega un momento que todo esto aburre. Danny Huston se acopla divinamente al papel del maléfico Stryker mientras que Lynn Collins es encantadora como Silverfox, añadiendo un agradable toque de emoción a lo que es sobre todo una estoica fiesta de imágenes generadas por computadora. Aunque incursiona un prometedor nuevo grupo de mutantes por desgracia es poco lo que se les encomienda. Otros actores a destacar son Ryan Reynolds que interpreta al pico de oro Wade Wilson, conocido también como Deadpool; el rapero will.i.am como John Wraith; y Kevin Durand en el papel del gigantescos Fred J. Dukes, alias The Blob.
LO BUENO
Tal como se había previsto los efectos creados para Wolverine a través de imágenes creadas por computadora son maravillosas. El esplendor visual de un par de las escenas de acción más importantes lo dejará sin aliento, incluyendo las escenas de persecución en motocicleta y helicóptero; serán poco creíbles pero resultan sumamente divertidas.
LO MALO
Jackman y todos los demás parecen haberse tomado la historia muy en serio. Por más que trate de conseguir algún trazo de aquel aspecto de humanidad que diferenció a las películas X-Men anteriores de la corriente tampoco esta presente y hay que esperar demasiado tiempo para que la película realmente tome forma. Habrá que esperar el minuto 40 de la película para ver por primera vez salir las garras. Solamente entonces se disipa el tono psicológico.
¿POR QUÉ PERMANECER EN SU ASIENTO DURANTE LOS SIETE MINUTOS DE CREDITOS AL FINAL?
Una advertencia para aquellos que pudieran creer que la película ha terminado cuando presenten los créditos finales: no se levante de su asiento aún porque falta ver algo más.