Por Oswaldo Betancourt L.

Dentro de este género, Bryan Singer trajo de vuelta a los mutantes con más fuerza que nunca e hizo una de las mejores películas de superhéroes del año y de los últimos tiempos.

La reunión de tantos mutantes (de ambas generaciones) se logró exitosamente y aunque, obviamente, hay protagonistas, no sobra ni se desperdicia la aparición de ninguno de los otros personajes.

No importa si no has leído el cómic, o visto la caricatura, y tal vez la disfrutes sin haber visto las otras películas,X-Men Días de un futuro pasadoes apta para los que no conocen nada de este mundo y también para quienes traen todo o algo de ese bagaje, que le da más sabor.

Como en cualquier adaptación, no se debería comparar la película con el texto original porque son cosas muy diferentes; pero de hacerlo, sólo diré que la versión cinematográfica es uno de esos extraños casos en que resulta mejor porque ofrece un argumento mucho más rico y complejo, aunque la esencia se mantiene.

El futuro de todos los mutantes, e incluso de la humanidad, está dominado por los Centinelas, los pocos sobrevivientes que quedan tienen un plan para cambiar las cosas: ir al pasado y evitar un incidente que desencadena su actual situación. En esta parte vemos a miembros de la vieja guardia como Tormenta, El Profesor, Magneto, Kitty Pryde y Bobby Drake acompañados de nuevos personajes como Bishop, Warpath y Blink entre otros.

En el pasado, encontramos a un Charles diferente del que conocimos la última vez; su enemistad con Erik entrará en tregua por dos personas: Logan y Mystique, sólo que ciertos eventos cambiarán sus planes en el transcurso de la historia.

Todas las actuaciones se merecen un debido reconocimiento, desde las versiones adultas y jóvenes de los protagonistas, hasta el papel deHugh Jackman, quienquizás hace su mejor interpretación deWolverine.

Las peleas están muy bien montadas y es emocionante ver a estos personajes enfrentarse. Además hay una gama interesante de emociones: unos momentos te hacen reír, otros te emocionaran, también te entrará la nostalgia (y recordarás las entregas anteriores de esta saga) y hasta te llevarás una que otra sorpresa agradable.

La acción nuevamente está muy ligada al contexto histórico, pero tampoco se trata de que te pongas a repasar tus libros de historia, sí tienes ese conocimiento bien, si no, no pasa nada, se entiende a la perfección, o en otras palabras, se hizo un buen trabajo de guión.

Desde la entrega anterior (X-Men Primera generación) se ignoraron ciertas líneas temporales del mundo creado por Marvel, aquí ocurre una vez más con la magnífica aparición de Pietro (alias Quicksilver) y su hermana (a quien sólo vemos un momento), porque en el cómic son hijos del mismísimo Magneto; la producción tuvo esto muy en mente e hizo un guiño en uno de los comentarios del veloz mutante.

Los efectos y el 3D valen bastante la pena y le dan un plus a la película que, en resumen, cumple y hasta supera las expectativas que generó en todo este tiempo. Verla por fin en la pantalla grande definitivamente es obligado, ya que pone la vara alta para las siguientes cintas que tengan su origen en algún cómic.

P.D. No te levantes de tu asiento hasta ver la escena post-créditos, es breve pero importante para lo que vendrá después: X-Men Apocalypse.