Wall-E es una comedia de aventura extraordinaria, conmovedora e hilarante que logra llevar la animación a nuevas alturas para brindarnos pura diversión veraniega fuera de este mundo.
Historia
Durante los primeros 40 minutos no escuchara pronunciar palabra alguna prácticamente desprovisto de palabra alguna, conocemos a un robot obsesionado con el trabajo llamado Wall-E (para las siglas Waste Allocation Load Lifter Earth-Class) mientras cumple con su tareas cotidianas – de organizar basurero abandonado donde yacen los restos de lo que alguna vez fue la vida antes de que los humanos se vieron obligados a irse de la tierra (o morir) en el siglo 22. Aparentemente, nadie tuvo la previsión de apagar a este robot así que el sigue haciendo su trabajo en una ciudad misteriosamente vacía. Y un buen día aterriza una nave espacial de la cual desembarca una fenomenal robot de búsqueda llamada EVE (cuyas siglas significan Extra-terrestrial Vegetation Evaluator). EVE establece una relación emotiva, e incluso romántica con el pequeño Wall E, lo cual representa su primer contacto con cualquiera cosa o persona (a parte de su mascota cucaracha) en unos 700 anos. Cuando EVE descubre que Wall-E parece haber dado con pruebas vivientes de que la Tierra es nuevamente habitable, ella se marcha estrepitosamente para avisarles a los humanos abordo del Axiom – una estación espacial gigantesca – que al parecer ya podrán regresar a casa. Al no querer desprenderse de la compañía de EVE, Wall-E también se embarca en la nave justo antes del despegue. Así es que Wall-E viajará para portar al futuro surrealista la esperanza que brinda el pasado.
Actuación
Prepárese para enamorarse de la estrella de la pantalla más original y enternecedora que haya visto en anos. La actuación extraordinaria en esta oportunidad la brinda un robot que murmura sonidos – no palabras – pero que hace sentir su vibrante energía gracias a la innovadora tecnología de animación con imágenes creadas por computadora y un diseño de voz vocal del legendario experto de sonido Ben Burtt (R2D2 de Star Wars). Logra convertir a este pedacito de metal enamorado en el elemento mas humano de toda la película. El viaje por el espacio da lugar a algunos encuentros con otros robot inadaptados y unos humanos redondos inmóviles, interpretados apropiadamente por veteranos como Jeff Garlin, como el capitán de la nave, Fred Willard, John Ratzenberger, Kathy Najimy y Sigourney Weaver como la computadora de la nave. Pero quienes se llevan los laureles por sus trabajos de voice-over son Burtt y sus colegas de diseño de sonido.
Dirección
Pixar lo logra de nuevo. El co escritor/director Andrew Stanton ganó un Oscar por su trabajo en Finding Nemo y ha estado involucrado prácticamente en todas las obras maestras de Pixar que van desde Toy Story hasta Ratatouille ganadora de un Oscar el año pasado. Su energía creativa lo lleva a explorar nuevas posibilidades para los dibujos animados en el original Wall-E, que se aleja del formato habitual de criaturas hablantes para estremecernos con una historia de amor surrealista y emotiva que despierta conciencia del ambiente. La película es una alerta sobre el destino que pudiera sufrir nuestro planeta y a la vez brinda esperanza de que aun estemos a tiempo para tomar medidas correctivas. Stanton lleva su habilidad creativa a un nivel bastante atrevido al hacer de Wall-E una película muda durante casi la mitad de su duración para crear una experiencia cinemática de dibujos animados que Chaplin, Keaton y Jacques Tati hubiesen disfrutado infinitamente. No es nada fácil mantener al público entregado de lleno a ver a seres no humanos desprovistos de lo necesario para comunicarse que aprenden no solo a comunicarse bien sino también a quererse los unos a los otros. Stanton crea un mundo visual hermoso aunado con una historia conmovedora que emocionará a todo él que la vea.