Por Jaime Azrad @_azrad

La pérdida de memoria y Rachel McAdams parecen tener un imán. Y es que, por lo visto, a la actriz de Diario de una pasión (2004) le atrae participar de películas románticas en donde tiene que ser convencida de que ama a quien presume ser su esposo, y que no recuerda. Más allá de coincidencias y parecidos entre los personajes que interpreta, hay que reconocer que tiene talento para ello.

Inspirada en un historia real, Votos de amor habla de Paige y Leo (McAdamas y Channing Tatum), una excepcionalmente feliz pareja de recién casados que sufre un terrible accidente automovilístico. Terrible no por las complicaciones médicas, sino por las consecuencias que éste tiene en los recuerdos de Paige, quien parece haber olvidado todo respecto a los últimos años de su vida.

En la lucha por recuperarla y salvarla de la vida de la que escapó, Leo se propondrá ganarse de nuevo a Paige a través de enormes esfuerzos por ser compatible con lo que ella cree que es su vida, aunque haya dejado de serlo mucho tiempo atrás. La confusión, manipulación y desesperación harán que Leo se las vea negras, mientras que Paige dejará ir poco a poco aquello que en una época la hizo tan feliz.

Los diálogos a veces son forzados, los personajes son planos y demasiado sencillos y es difícil creérnosla, pero se pasan dos horas agradables. La historia tiene sus tonos bonitos que en todos reviven la esperanza y, entre el vaivén de las confusas decisiones, será fácil encariñarse con la perfección de Leo, un incansable hombre ideal destrozado por el destino.

Comedia, tragedia… no importa, la situación romántica se apodera de la cinta, ésta busca parecer innovadora o quitarse (a veces) lo cursi de encima, pero seamos sinceros: nadie espera encontrarse con una película de acción después del título que pidió en taquilla.

Quien quiera toparse con situaciones melosas y aspiracionales está en la sala correcta, la historia entretiene y ayuda a pasar el rato, sobre todo si es en compañía de ese ser amado.