Luego del nacimiento de Renesmee Carlie Cullen (Mackenzie Foy) y la transformación de Bella Cullen (Kristen Stewart) en vampiro, Irina del clan Denali (Maggie Grace) descubre a la niña cazando con su familia y la confunde con una “niña immortal” (especie prohibida por las leyes vampíricas), por eso acusa a los Cullen, y los Vulturis deciden encaminarse a Forks y acabar con la niña y su familia.

Junto con los Quileutes, los Cullen reúnen a todos los vampiros posibles para que sean testigos de su inocencia, y por si acaso preparan un ejército.