Una comedia romántica más. Una más. Y sí, sigue todos los clichés. En primer lugar, sale Renée Zellweger como una mujer a la que sólo le importa su trabajo, el dinero, los zapatos y no tiene tiempo para enamorarse, hasta que una evento en su vida, le cambia su perspectiva emocional. Qué flojera. Lucy es una joven empresaria cuya única misión es ser ambiciosa y llevar una vida superficial y egoísta en Miami.

De pronto se entera que habrá una promoción muy importante, por lo cual decide hacer un trabajo en un pueblo perdido en medio de la nada. Como es de esperarse, se topa con situaciones bizarras como el hecho de que tiene que lidiar con el frío inclemente de la zona, que por arrogante los pobladores no la quieren en un inicio. Sin embargo poco a poco comienza a ganarse a la gente y se da cuenta que tiene el poder de salvarlo de la ruina. Este viaje hará que cambie su actitud y prioridades. Claro, eso pasa siempre en la vida real. Y como plus, Lucy se enamora…