El problema:
Una banda de amigos está dispuesta a buscar un tesoro y salvar a su pueblo; ¡oh!, pero una familia de mafiosos (Los Fratellis; sí, como la banda) también quieren la fortuna.

La solución:
Tener suerte y que la avaricia de los adultos salve tu pellejo.

La lección:
Los estereotipos no son malos. Cada uno de tus amigos (el gordo, el ñoño, la "porrista bitch", el inadaptado, el atleta) posee una cualidad que puede salvarte en cualquier momento. Ah y claro: aunqueseas un niño feo y regordete, siempre podrás alcanzar la fama, como el que la hace de Rudy y Sam Gamyi.