Para el verano nada mejor que una buena dosis de comedia romántica, con uno de los lideres de este género dedicado a robar suspiros: Matthew McConaughey, quien interpreta a Connor un hombre que ama su libertad, divertirse y las mujeres, justo en ese orden (cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia).

Es un soltero empedernido quien desecha a sus amores sin ningún cargo de culpa, es más, si puede hacerlo por teléfono le da igual. Esta actitud tan misógina hacia el romance, le pega a su hermanito Paul, unos días antes de su boda. Cuando parece que Connor va a arruinar el matrimonio y la fiesta, recibe la visita de uno de los fantasmas de sus ex novias, quien lo llevará por un viaje a través de todos sus fracasos amorosos desde los pasados, hasta los que vendrán.

Juntos harán un serio análisis de por qué él se ha vuelto un mujeriego insensible y sobretodo, si aún hay esperanza de que halle su verdadero amor. Yo ya estoy empalagado.