¿En dónde la conocimos?

La conocimos por accidente en el cine cincuentero. La vimos en películas con nombres muy sugestivos como Striporama, Teaserama, Bedroom Fantasy y Varietease. Si las volvieran a hacer en esta época, los creativos traductores nombrarían todas sus pelis con títulos como “Ropas al aire 1, 2, 3 y 4”.

¿Por qué la recordamos?

Simplemente porque es difícil olvidar a una mujer desnuda… sobre todo cuando se trata de una tan guapa como St. Cyr. Era desinhibida, graciosa… y nos encantaba por eso. Eso claro, además de sus enormes atributos.

¿En dónde nos gustaría verla?

Donde sea… a fin de cuentas, todo en su carrera acaba en desnudez. Aunque pensándolo bien, la queremos en la tina, justo como en la imagen de arriba. Nada como llegar a la casa después de un día Godínez, y ¡oh, sorpresa!