A la marca de juguetes de colección Neca, se le ocurrió vender unas figuras de acción inspiradas en la película Django sin cadenas, la nueva cinta de Quentin Tarantino que habla sobre la esclavitud.

Las figurillas desataron la polémica en Estados Unidos al herir la susceptibilidad del Proyecto Esperanza Islámica, que pide las retiren del mercado porque ‘trivializan los horrores de la esclavitud y lo que los afroamericanos vivieron’.

Tremenda bronca se echó encima la marca, que únicamente quiso treparse a la euforia que causa ya la nueva película de uno de los más reconocidos directores de cine, al haber recaudado 106 millones de dólares en taquilla en Estados Unidos.

Esta cinta, protagonizada por los ganadores del Oscar Jamie Foxx y Christoph Waltz, y el nominado Leonardo DiCaprio, se estrena en México el 18 de enero y está nominada a 5 Globos de Oro.