Basada en hechos reales, esta cinta se desarrolla en Inglaterra, en

1837, cuando Victoria (Emily Blunt) tiene 17 años de edad y es la

heredera legítima al trono inglés. Su madre y tutor harán lo posible

porque firme su rechazo al cargo antes de cumplir los 18 años. Sin

embargo, ella luchará por la corona que le corresponde, aún cuando se

sabe joven e inexperta. Por esta razón, pronto todos tratarán de

persuadirla para alcanzar intereses personales; entre ellos Alberto, su

primo.