Desesperada por liberar a su gente del dominio de su vengativo esposo y poder así traer paz a su tierra, la Reina Alcmena reza a los dioses por un poco de dirección. Es escuchada y bendecida con un hijo: Hércules, quien proviene de Zeus, el dios de la guerra. Mientras que su verdadera identidad permanece oculta, la ilegitimidad de Hércules es resentida por el Rey Anfitrión, quien está a favor de su hijo mayor, Ificles. El joven Hércules se enamora de la hermosa Hebe, hasta que son separados por su padre quién proclama que Ificles deberá casarse con la princesa. Mientras planea escaparse para poder casarse con su amor, Hércules es capturado por los guardias del Rey Anfitrión y enviado a morir en la guerra. Al escapar de la muerte, Hércules une fuerzas con un compañero guerrero, Sotiris, en una noble causa por liberar al reino de la tiranía del Rey Anfitrión, recuperar a su amor verdadero de las garras de su hermano y tomar su lugar como el más grande de los héroes griegos.