Por Sandra Lucario

Desde el principio de los tiempos, el hombre ha hablado de los viajes astrales y desde hace un poco menos ha supuesto la existencia de otras formas de vida fuera de este planeta. Aunque en la actualidad, el séptimo arte rueda historias que tocan este tema, lo hace con una visión moderna, con escenarios y situaciones contemporáneas. John Carter nos regresa a los orígenes y nos ofrece un relato lleno de mitología, paradigmas, aventuras y hasta romance.

La cinta que dirigeAndrew Stanton– guionista conocido por su trabajo enToy Story, WALL-E, Buscando a Nemo y Monsters INC– es una adaptación a laserie de novelas escritas porEdgar Rice Burroughs.El protagonista, un veterano de guerra, es sacado de la historia original,Una princesa de Marte, para dar vida a un hombre valiente pero egoísta que dedica su vida a buscar oro hasta que se sorprende a sí mismo jugando con su gravedad en el arido desierto de un lugar desconocido.

Entre enormes extraterrestres de cuatro brazos y otros con apariencia humana, John Carter (Taylor Kitsch)inicia su andar por Barsoom (como los habitantes de ese planeta nombran a Marte, planeta al que se transporta Carter y que ocupa el cuarto sitioen nuestro sistema solar) con el único objetivo de volver a la Tierra; sin embargo, al conocer a laprincesa Dejah Thoris (Lynn Collins)sus planes van cambiando hasta que se reencuentra con aquel sentimiento que alguna vez destruyó: ayudar a otros.

Una vez que Carter –o Virginia, como todos comienzan a llamarlo– se integra a la comunidad de los Tharks, entra a escena la princesa (y tambiénregente de la Real Academia de las Ciencias)Dejah, quien le pide su ayuda para salvar a su pueblo (Helium)del sometimiento con el que lo amenaza Zodanga, su enemigo.

Carter termina instalándose en el dilema de ayudar al pueblo de Dejah o volver a su vida en este planeta.

Con un guión bien trabajado y excelentes efectos especiales que hacen que valga la pena pagar la pantalla IMAX, esta cinta le sacará una enorme sonrisa a los amantes de la ciencia ficción.