Cali convence a sus amigas de pasar las fiestas navideñas en casa de su tío, donde pueden festejar a lo grande. Al darse cuenta de que la casa no es de su tío, Holly y Mel deciden que es momento de irse, pero son sorprendidas y deben actuar rápidamente para salir del problema en el que están metidas antes de que sea demasiado tarde.