Gomorra es una de las cintas mejor logradas acerca de la mafia. A diferencia del cine de Hollywood, en este film italiano (que al ser el país donde se desarrolla la trama, se elimina el romanticismo gángster), el crimen se presenta sin tapujos y en forma de documental: balazos, traiciones y una vida que no respeta a la familia ni tampoco la amistad. Aquí sólo el más fuerte vive.

La película está basada en el best seller de Roberto Saviano y se divide en cinco historias que reflejan el mundo napolitano de la mafia:

Desde niños que se involucran en el negocio (quienes en su fase de inclusión reciben tiros con un chaleco antibalas), y quienes traicionan sin ningún remordimiento.

Las condiciones laborales de la industria de la moda (con tratos infames, xenofobia y salarios miserables), así como la trata de los desechos tóxicos.

También se verá la vida de dos chicos que sueñan con la vida glamorosa del mundo hollywoodense de los mafiosos, sólo para caer en cuenta que la realdiad (su realidad) es más cruel y humana.

En Gamorra no hay héroes, ni hadas. Es una obra que representa la crudez del ser humano.