La Estancia es un pueblo. Uno donde el abandono y el silencio son los únicos compañeros de Jesús Vallejo y su hijo Juan Diego, los últimos habitantes del lugar. La Estancia, de pronto, también se convierte en motivo: el de Sebastián, un documentalista que necesita hacerse de una historia. La Estancia, entonces, deja de ser un lugar para transformarse en el momento de un proceso, en el de un trayecto creativo y existencial. Espacio, Tiempo y La Estancia.