Hormonas adolescentes + El Diablo + un ex-exorcista es la ecuación base que se utilizó para crear esta película.

El directorManuel Carballo –13 MI3EDOS, serie de Televisa que pasó con más de pena que gloria–nos presenta “El Anticristo: La posesion de Emma Evans”, historia en la que una adolescente de 15 años es poseída por un demonio.Y no sólo eso. Resulta que su tíoes un sacerdote especializado enexorcismos que –de pura casualidad– participó en un exorcismo fallido con una chica que –también de pura casualidad– tiene casi de la misma edad que Emma.

El problema es que la idea resultó mejor que la película.Lastimosamente, conforme van pasando los minutos, ésta se vuelve pesada y lenta, al grado de que únicamente hay 2 escenas que llegan a causar cierta tensión en el espectador, y obviamente esto no puede rescatar un filme.Incluso, su desarrollo llega a ser tan rápido que a escasos 20 minutos de iniciada, todas las actuaciones se vean forzadas y 10 minutos más tarde se vuelven insufribles.

Emma, quien con cada gesto y ademán que hace, más que parecer poseída luce como si tuviera dolores estomacales; el sacerdote que a los 5 minutos de entrar en escena –sin decir agua va– ya está practicando un exorcismo; la mamáque a pesar de ver a su hija levitar dice que lo más seguro es que se trate de un problema mental; el papá, quien más que ser el hombre de la casa hace el rol que cualquier extra pudo haber hecho;un espíritu maligno,aburrido y poco convincente de quien nadie sabe cómo llegó ahí;todo esto hace que nos demos cuenta de queesta cinta de terror no es NADA buena.

Sí, puede que llegue a causar algunos sobresaltos y un poco tensión gracias a un par de escenas, pero nada más.

Ahora bien, si quieren tomar con filosofía el haber estado sentados durante 98 minutos, les diremos que en esta ocasión el Diablo representa esa libertad de hacer y deshacer con la que tanto soñamos cuando somos adolescentes. Obviamente sólo la libertad y no las obligaciones.

Conclusión: El Anticristo no da miedo, tieneun desarrollo que llega a ser muy forzado y un final que te da la sensación de que toda la película de principio a fin se pudo haber contando en 10 minutos. La recomendación: ve a verla bajo tu propio riesgo.