Abraham Lincoln: cazador de vampiros se estrenó el fin de semana pasado, con lo que queda demostrado –una vez más– que las historias relacionadas con sangre y colmillos siguen vigentes. Y, aunque tienen cosas que diferencian a unas de otras, la verdad es que hay elementos que ya nos sabemos.

Ser vampiro, implica ser ‘Dark’

Sabemos que alguna vez estuvo padre eso de usar terciopelo, beber sangre en copas, odiar a la gente y demás excentricidades. Pero eso ya pasó de moda desde hace siglos. ¡Por Dios, actualícense! ¿A poco no estaría más cool un vampiro bienbad assque se vea gandallón, en vez de un flaco raquítico que parece dark del chopo?

La felicidad no es una opción

Aparentemente no importa que sean guapos, o guapas, adinerados e inmortales. Nunca van a ser felices con lo que tienen. Siempre envidiarán a los demás. Como si tener un trabajo de 8 hrs, y tener que cuidarte para no morir fuera algo envidiable…¡PFF!

El vampiro es una representación de Brad Pitt

No hay vampiro feo; y si lo hay, seguro no es el protagonista.

Las mujeres vampiro son esculturales, súper sexys y bisexuales

¿Alguna vez han visto que una de esas vampiras que encajan sus colmillos en los seres inofensivos y andan por las noches en oscuras callejuelas estén chimuelas, flacuchas, usen lentes de fondo de botella o tengan imperfecciones faciales? Obvio no, las vampiras que salen en el cine son talla 36 C, su cintura mide 65 centímetros y tienen el trasero con el que Alejandra Guzmán ha soñado toda su vida.

Los vampiros buenos sólo succionan sangre de ratas o de gente malvada

Hay seres de la noche que tienen bondad en su corazón. Y también un muy mal gusto a la hora de comer. Y es que como son tan buenos pues no pueden andar por la vida matando gente inocente, ¿entonces qué hacen?, pues van tras los ladrones, asesinos, violadores y las ratas. Son justicieros maldecidos a los que nunca nadie les ha agradecido por succionar la sangre completita de un malhechor.

Siempre te gustarán las mortales

Aunque las vampiresas sean extremadamente bellas, sexies, e inmortales, son totalmente indiferentes para ellos. No sabemos muy bien por qué, digo… cuando una mujer es inmortal no tiene que preocuparse por muchas cosas, ¿o sí?

Protagonista bueno asesinavampiro malo

En una cinta de vampiros, los malos siempre pierden. Son como las telenovelas mexicanas en las que Thalía empieza siendo una piojocita y termina siendo adinerada y poderosa. Total que en las películas de vampiros el bien siempre gana. Bueno.

La luz solar, la plata y el ajo, enemigos a muerte

A estas alturas de la ciencia y la tecnología, todas estas cosas no deberían de hacerles ni cosquillas. Son tan… siglo XVIII. Vamos, ya estamos en el XXI. Seguro existe un director de cine capaz de hacer una buena trama, en la que los efectos especiales queden en segundo término (y el romance en tercero) y surjan nuevos enemigos a muerte de los vampiros modernos.

Si eres vampiro, nunca tendrás prisa

Mientras nos quejamos de que ‘no nos alcanza el día’ estos seres tienen todo el tiempo del mundo. Jamás tendrán prisa para hacer nada.Pueden posponer todo, total, son inmortales y siempre dejarán para mañana lo que pueden hacer hoy.

Odiarás a los hombres lobo

Entre hombres lobo y vampiros siempre ha existido una batalla feroz. Y después de ver Crepúsculo entendemos perfectamnte por qué. ¿Quién no odiaría a cualquier ‘ser’ así? ¡Que los maten!