HOLANDA
La Lista Negra

Director:

Paul Verhoeven
¿Por qué ganaría?
Verhoeven, originario de Amsterdam, se
fue jugar al nuevo continente a mediados de los años ochenta. Ya en
América, su juego violento alarmó a las buenas conciencias con películas como
Robocop y Basic Instincts. En 2006 de nuevo califica para Holanda y se anota
con La Lista Negra un nuevo clásico. Esta historia de de una cantante judía que
se infiltra en la Gestapo demuestra que Verhoeven no necesita efectos
especiales para seguir siendo ese jugador, rudo, sexual, magnífico.

Dinamarca
Festen
Director:

Thomas Vinterberg
¿Por qué ganaría?
Dogma, ese estilo de juego minimalista,
tan criticado, pero que bien ejecutado obtiene tan buenos resultados como con
esta cinta. Festen es una intensa y desgarradora crónica familiar que sucede
justo en el cumpleaños del patriarca, sucios secretos de esta familia disfuncional
saldrán a flote. El juego de Vinterberg radica en el puro estilo, uno que hace
que el espectador se sienta en la cancha y sufra del drama con la misma
intensidad que los actores.

JAPÓN
Violines en el Cielo

Director:

Yôjirô Takita
¿Por qué ganaría?
El estilo japonés, siempre personal,
siempre haciendo culto a sus costumbres, se anotóun tanto más con esta
gran jugada: Okuribito (titulada impunemente como "Violines en el Cielo") fue
ganadora del Oscar en 2009 como mejor película extranjera. Una cinta hermosa
(no hay otra palabra) sobre los rituales de la muerte y la vida en Japón.
¿Golpe de suerte?, ¡para nada!, nunca menosprecien la belleza, el exotismo y la
experimentación del juego japonés; ellos siempre están listos para sorprender
al público.

CAMERÚN
Chocolat
Director:

Claire Denis
¿Por qué ganaría?
Para un país que ni a cines llega (ver
nota por si lo dudan https://www.20minutos.es/noticia/453730/0/cine/camerun/cierre/)
es un milagro que exista cine nacional. Chocolat (no confundir con la película
del mismo nombre protagonizada por Jhonny Depp) es una cinta sobre el regreso
de una chica Francesa al lugar donde pasó su infancia, un lugar bello pero
incrustado en el peor de los racismos: Camerún. Sabemos que esta no ganará el
mundial, pero al menos es una digna representante y en una de esas da la
sorpresa (como sucedió en Italia 90).