22 de febrero 2011
Big Fish
Por: Mariana Camacho Solana
¿Chillonómetro?
Paterno-funeral-cuentista
¿En qué parte?
Cuando Ed le dice a su hijo que es “su turno” de contar la historia en el hospital. Entonces Will narra cómo escapan de los doctores/enfermeras; luego manejan cual Schumacher por la carretera hasta que llegan a un rió ( Will cargando a Ed) donde los esperan todos los personajes que han aparecido en la cinta, y al final, está … el amor de su vida.
¿Por qué moqueamos?
Porque es muy fuerte. Es como la escena entre padre e hijo más conmovedora y que logra unir a dos personas que no se soportaban, con una sola narración, Will hereda lo que más odiaba de su padre: su imaginación. Es imposible no llorar. Imposible.