Por: Hugo A. Juárez

“Xscape” es el segundo disco póstumo de Michael Jackson (después de “Michael” del 2010), y esta vez es producido y compilado por L.A. Reid, CEO de Epic Records (división de Sony Music Entertainment) y principal motor de artistas como OutKast, Mariah Carey, Avril Lavigne, Pink, Justin Bieber, Rihanna, Usher y Dido, entre otros.

Como muchos saben, durante su carrera Jackson grabó cosas por aquí y por allá que nunca salían a la luz o no se completaban. Reid se dio a la tarea de obtener los derechos y revisar los archivos del fallecido cantante, así que recopiló lo que para él eran ocho temas destacables con el fin de realizar este disco inédito y “contemporaneizarlo”, como llamó a este proceso.

Además, eligió a otros productores “de confianza” para colaborar con él, como Timbaland (fructífero impulsor del hip-hop), Stargate (coescritor del éxito de Beyoncé “Irreplaceable”), Rodney Jerkins (quien trabajó con el mismo Michael) y Jerome Harmond (quien ha colaborado con Justin Timberlake y Beyoncé, por mencionar algunos artistas).

El resultado es un disco ecléctico que no oculta el estilo que caracterizó al Rey del Pop en sus mejores épocas, por lo que es mucho más cercano a lo que hemos guardado en nuestra memoria popular que lo que habíamos escuchado en su anterior disco póstumo, con toques de modernidad.

Y el trabajo de “contemporaneización” surtió efecto: en Xscape escuchamos ritmos modernos, que bien podrían sonar en cualquier antro o estación de radio, pero conserva la esencia de Jackson gracias a que se dejó intacta la parte vocal.

Otra de las razones por las cuales el disco podría sonar sin problema en cualquier lado es su toque “retro funk pop” que también podemos escuchar en lo último de Daft Punk, quienes, por cierto, han admitido que Michael Jackson fue influencia para “Random Access Memories”.

De esta forma, el primer track de este álbum de ocho canciones (y el más destacable), “Love Never Felt So Good”, es el que más influencias de esa música de los 70 y 80 tiene, con un ritmo pegajoso y bailable pero meloso, coro recordable y algunos arreglos de corte “clásico” al inicio, con pianos y violines que permanecerán a lo largo de todo el disco manifestados de diferentes maneras y que, al mismo tiempo, le dotan de unidad.

En “Chicago” el ritmo es más lento (tipo lounge) y los arreglos electrónicos son más discretos para dar lugar a la voz del cantante que brilla bastante, interponiendo dos diferentes tonos (uno más suave y sutil y otro más fuerte y furioso) a lo largo de la melodía.

[video:https://www.youtube.com/watch?v=VZ9HkICDuOI]

Un teclado ligero da inicio al tercer corte, “Lovin’ You”, que es uno de los temas más clásicos de “Xscape” y donde Jackson luce más con su voz en un tema relajado que no oculta sus influencias de la música setentera y ochentera.

En “A place with No Name” estamos ante una faceta mucho más electrónica, con una especie de beatbox atinado, sintetizadores, fuerza vocal y arreglos muy evidentes. El ritmo en este caso es más monótono.

El quinto, “Slave to the Rhythm”, suena como a un remix electrónico de una rola originalmente muy diferente que no resulta ser tan pegajoso, pero inevitablemente hace imaginar a un Michael Jackson bailándola con maestría en el escenario.

“Do You Know Where Your Children Are?” y “Blue Gangsta” hacen que decaiga el ritmo del disco rayando en la oscuridad, en el exceso del pop electrónico y los arreglos vocales.

La situación mejora con el último track del disco, “Xscape” que, aunque no es el mejor track, representa una buena combinación del estilo clásico de Jackson con ritmos más modernos.

[video:https://www.youtube.com/watch?v=N7_iLMq8REo]

A lo largo de todo “Xscape” es evidente el abuso de la producción, de los arreglos musicales y de la electrónica, que en algunos casos da lugar a melodías con potencial éxito, y en otros da la impresión de ser una obra demasiado adornada o reconstruida a partir de muchos pedazos inconexos, como en “Slave to the Rhythm”.

“Xscape” no logrará lo que Jackson logró en vida con sus discos, pero lo que es un hecho es que L.A. Reid logró conservar el sello vocal del artista, respetando el ritmo que el cantante marcaba con su voz sin necesidad de tener música en el fondo. A diferencia de “Michael”, “Xscape” suena como si el mismo Jackson hubiera elegido en 2014 los temas que lo conforman, sin presiones para sobreexplotar su imagen o dejar más dinero a sus deudos.

*El disco saldrá a la venta tanto física como digitalmente el 13 de mayo de 2014. Ya se puede preadquirir desde el 1 de abril en iTunes.