Por: Omar Morales @OmarInMorales

Artistas como Laura Marling, en apariencia, hay muchas (demasiadas, diría un quisquilloso): mujeres jóvenes disfrazadas de fragilidad que tocan la guitarra (acústica, de preferencia), y cantan sus propias melodías que hablan de adicciones amorosas, desengaños y bancarrotas de autoestima…

Cuenten los nombres y rostros que viajaron por su memoria con esta simple descripción, despréndanse de fanatismos y piensen a cuántas de estas cantautoras podrían reconocer a primera escucha…

Menciono esto por el dicho reduccionista y mala leche que una amiga me soltó el otro día, “No sé qué tanto le aplaudes a esa niña, todas cantan igual“. Y sí, la oferta musical de muchas de “esas niñas” abunda en similitudes, pero afortunadamente (si escuchamos con atención) la metafísica del arte marca diferencias.

Laura Marling, por ejemplo, quien elude con mucha habilidad la estética de lo ordinario con letras cargadas de poesía y mitología:

Well I can’t be your horse any more
You’re not the warrior I’ve been looking for
I see what you mean to do with me
I cannot protect you from who you want to be
Go face the Lord on your own
You have my love but it will not make you grow
I can’t be your horse anymore
You’re not the warrior I would die for…

Laura Marling, quien ha catalizado la herencia punk de ancestros como Lou Reed o Patti Smith, convirtiéndola en canciones ansiosas y amorosas:

Laura Marling, quien acaba de presentar su quinto Lp de estudio y no sólo no fue malo (por aquello del refrán) sino que hasta ahora ha sido el mejor. Un disco que escribió inspirada en su periodo californiano (es londinense pero la expansión de horizontes espirituales la mudó temporalmente a Los Ángeles), un disco que ella misma compuso y produjo, para el que electrificó su guitarra y junto a sus músicos se colocaron lo más cerca que han estado de una banda de rock.

Short Movie es un disco de personalidades múltiples, canciones como Warrior y Howl son de armonías grises e hipnóticas, pero False hope y Strange sudan la ansiedad del sinsentido, mientras que Walk alone y Worship me son dos hermosas odas al amor de obsesiones profundas.

Laura Marling es una mujer que toma riesgos y evita rodeos, salvo que los errores humanos se lo impidan no graba más de dos tomas por canción, por eso sus discos laten, respiran, se mueven, están vivos. Short Movie es, en mi opinión, una de las grandes obras musicales del rock que escucharemos este año. Mis favoritas: False hope, Don’t let me bring you downy Short movie.