Por Omar Morales

Lo primero que se detecta en los discos de Mumford & Sons es una discordancia espacio temporal: sus integrantes nacieron durante la década de los 80 en Inglaterra, pero pareciera que se educaron musicalmente en la zona de los Apalaches, en Estados Unidos, hace más de 100 años. Estos muchachos rascaron en la tradición del folk británico y el bluegrass norteamericano del siglo XIX, los sometieron a las estructuras pop de nuestros días y han sido capaces de crear varias canciones memorables con esos elementos (poco originales, pero memorables, porque inevitablemente recuerdan a varias leyendas de su estirpe). Su disco debut, Sigh no more, fue una bomba de popularidad que los llevó a las nominaciones del Mercury Prize, los Grammy y a ganar el BRIT Award a mejor álbum del año. Babel persigue el mismo destino.

En medio de una industria dominada por canciones con exceso de maquillaje, la música de Mumford & Sons destaca por el anacronismo de sus elementos:banjo, contrabajo, metales, violines, mandolina, piano, acordeón, percusiones acústicas y hasta un dobro son la base de su sonido. Sus cuatro integrantes son unos habilidosos multiinstrumentistas y eso los pone unos cuantos escalones más arriba del estándar pop.

‘Give me hope in the darkness and I will see the light’

Ghosts that we knew

Salvo algunos arreglos con guitarra eléctrica, toques de distorsión y mayor fuerza en las percusiones, musicalmente hay mejoría sin evolución respecto a su trabajo anterior.Con este nuevo disco Mumford & Sons nos repite la dosis: melodías épicas, líricas cargadas de una fuerte espiritualidad y un trabajo vocal impecable con estrofas y coros de contagio inmediato que con la guía del mismo productor, Markus Dravs, han potenciado sus cualidades sonoras. Hay grupos que no alteran su estilo con el paso del tiempo y en algunos casos, como éste, se agradece. Babel es una muy buena segunda parte de Sigh no more, arriesgándome un poco diría que mejorada. La única duda que me genera es, ¿cuántos discos más resistirá la fórmula del folk virtuoso con melodías pop? Sólo el tiempo…